TOMAR EN CUENTA QUE ESTA PLANEACIÓN ABARCA LAS SEMANAS 1 Y 2. Plantear al grupo que el propósito de la sesión es reconocer los movimientos del cuerpo.

(Primera sesión)

1. Iniciar la sesión con algunas respiraciones para tomar conciencia del propio cuerpo. Inhalar y exhalar cuatro o cinco veces, contando hasta tres antes de expulsar el aire. Centrar la atención en el diafragma cuando se expande una vez que se inhala y exhala el aire. Comenzar invitando a los alumnos a que inventen una manera de saludar al sol, la luna, las estrellas, a sus compañeros y a sí mismos utilizando su cuerpo. Para animarlos, mostrar un saludo al sol, por ejemplo: levantando los brazos y haciendo un arco con las manos entrelazadas sobre la cabeza. Para saludar a la luna, se podría sugerir bajar los brazos en forma de C, saludar a las estrellas, cerrando y abriendo las manos rápidamente simulando su titilar. Saludar a los compañeros, abriendo y juntando los brazos en forma de abrazo, saludarse a sí mismo con la mano derecha poniéndola sobre el corazón y hacer una reverencia. Permitir la libre imaginación de los niños y niñas para mostrar su propio saludo con movimiento. 2. Plantear al grupo el propósito de la sesión, respecto a reconocer los movimientos del cuerpo. 3. Para la observación de los movimientos independientes de su cuerpo, pedir al grupo caminar de manera libre por el aula y poco a poco inducir al movimiento de cada parte del cuerpo. Solicitar que realicen diversos movimientos, por ejemplo: mover las manos de distintas maneras una a una, juntas o haciendo algún sonido. Sacudirlas, aplaudir, entrelazando los dedos, uniéndolas sólo con las yemas, sólo las palmas, etc. Dedicar unos minutos al movimiento detallado de cada parte del cuerpo. 4. Dirigir el trabajo corporal hacia la capacidad que tenemos de hacer múltiples movimientos, incluidos los característicos de animales y la naturaleza. Pedir a los estudiantes que elijan un animal, el que sea su favorito, y reproduzcan sus movimientos cuando caminan, se agitan, están tranquilos, hacen ruidos, duermen o comen, etc. Por ejemplo, si eligen un borrego, intentar hacer su caminar corto, su manera de mover la cabeza y masticar, su balido. Si fueran un león, su manera de rugir, de agazaparse o saltar sobre su presa, etc. Solicitar que dediquen unos minutos a hacer distintos movimientos del animal elegido. Apoyar esta actividad elaborando máscaras del su animal favorito.